Este marco de implementación de evidencia viva busca apoyar a las organizaciones que trabajan en el desarrollo de síntesis de evidencia como parte de los productos de transferencia de conocimiento (KT), como recomendaciones en guías de práctica clínica (GPC), informes de evaluación de tecnologías de la salud (HTA), resúmenes estructurados de evidencia (SSE). ) para políticas institucionales y públicas, entre otros, en la tarea de incorporar evidencias constantemente emergentes y generar resultados válidos y confiables para informar la toma de decisiones.
Este marco de implementación guía a los equipos de las organizaciones a utilizar criterios apropiados para definir qué problemas clínicos (estructurados en preguntas clínicas) se benefician de una revisión constante de la nueva evidencia, la frecuencia con la que se deben llevar a cabo estos procesos y si se debe incorporar la nueva evidencia en la síntesis existente y las conclusiones de los productos KT que respalda esta evidencia.
El marco se divide en cuatro apartados fundamentales en función del momento en que deben ser aplicados durante el proceso de síntesis de evidencia. Cada sección plantea una serie de preguntas que guían a los desarrolladores (por ejemplo, el equipo técnico) en la definición de cada paso del proceso.